Taccia, la evolución de un icono
1962 - 2023
En 1962, Achille y Pier Giacomo Castiglioni diseñaron la lámpara de mesa Taccia con la idea de darle la vuelta a una lámpara de techo.
Su forma y estilo distintivos se ganaron rápidamente un lugar en la historia del diseño y, con el paso de los años, Taccia se ha convertido en una auténtica embajadora de la identidad y los valores culturales de Flos.
En 1970, Achille Castiglioni describió su diseño en una entrevista:
«Cuando la diseñamos no pensábamos en el prestigio, solo queríamos crear una superficie de enfriamiento que dispersara el calor».
En realidad, el soporte de la lámpara se diseñó para que se pareciera a un radiador, con el objetivo de enfatizar su función: la dispersión del calor que emana la propia lámpara. Su característico reflector con forma de copa de vidrio soplado era también una increíble pieza de artesanía. Pero, como todos los grandes diseños, Taccia ha evolucionado con los años para abrazar el progreso.
El primer modelo nuevo incorporaba una fuente de luz LED. Rápidamente le siguió un modelo con un reflector de plástico, que había sido la intención original de la pareja de diseñadores. La deformación por calor hacía que fuera imposible al principio, pero se logró resolver el problema gracias a la tecnología LED. Taccia también se ha lanzado en un tamaño más pequeño y en diferentes opciones de color.
Hoy, como parte de una colaboración continua con la Fondazione Castiglioni, Taccia está disponible en un nuevo acabado, Matte White, que amplifica la forma y el diseño puros de la lámpara. Una vez más, Flos reinventa una obra maestra para la era contemporánea, pero con el máximo respeto por su versión original. La historia de Taccia continúa.